martes, 5 de febrero de 2019

Oh- oh

Ayer y hoy han sido dos días de ansiedad. Sabe Dios qué me está pasando.

El punto es que acabo de cenar y tengo unos remordimientos horribles y un impulso por vomitar alucinante. He estado en el rango medio-inevitable de la purga, o sea, ya escuchando en mi cabeza y analizando las posibilidades de ser atrapada en el acto.

Estoy tratando de respirar hondo.

No hay comentarios.: