viernes, 15 de febrero de 2019

Bulla

En el piso de abajo están haciendo una reunión. Justo bajo mi ventana, que por cierto da a la calle, y como no tengo ventilador y hace calor, debo mantenerla abierta.

Odio la bulla.

Creo que esta noche no voy a poder dormir bien.

Pero no sólo por la bulla que hay afuera.

Quisiera poder expresarme libremente pero ni acá puedo, porque sí, es obvio que mi familia lee esto. Mi psicólogo ya lo hace, no me extrañaría que mi hermana también. Y no tengo ganas en estos momentos de que sepan qué pasa dentro de esta cabeza. Y nadie más me lee. Nadie. No me escuchan No me ven.

(¿Por qué los demás son tan importantes para mí?)

No puedo hacer que alguien entienda lo que siento o pienso. No logro que capten el terror y la angustia que siento cuando me dicen, campantes y felices, "tienes que comer mejor, para eso te he comprado tus suplementos". En otra época habría estado feliz. Hoy estoy cerquísima de botar esas cosas a la basura y no lo hago por respeto a que mi mamá se saca la mugre trabajando para comprarme eso y se preocupa demasiado por mi bienestar. Al menos el físico, porque al emocional no tiene acceso. No recuerdo cómo hacer que acceda y no estoy dispuesta aún a hacer lo necesario para que suceda. Me da asco ver gente comiendo. Quisiera poder encargarme yo de mis propias cantidades y tipos de comida sin que anden detrás de mí metiéndole más verduras a mi plato, y no sentirme socialmente presionada a hacer lo que la gente normal hace sólo porque quiero pasar como si fuera alguien normal.

No soy normal

"¿Por qué es necesario tanto drama?", me preguntó hoy mi mamá.

¿Ya te olvidaste, en serio? ¿Por qué te has olvidado de todo lo que aprendiste respecto a cómo lidiar con esto?  ¿Por qué no entiendes lo que yo siento ni tratas de ponerte en mi lugar? ¿Por qué no me esperas? ¿Por qué me presionas? ¿Por qué, sabiendo que estoy restringiéndome, crees que para mí tu "lata de cebo" es un "remedio"? Y tú, hermana, ¿por qué me miras así? ¡Me causa tanta vergüenza que me veas con esos ojos juzgadores!

"¿Por qué es necesario tanto drama?"

Me encantaría tener una respuesta mejor que "porque soy adicta a él, porque no me concibo de otra forma, porque estoy haciendo una pataleta pero sé que se me va a pasar".

Yo lo sé, he aprendido a que no duren tanto y que ni cuenta se den. Suele pasar cuando eres adicta al drama que necesitas cogerte de cualquier cosa para sentir que tu vida está caminando normal, y en estos momentos estoy en esta etapa de nube negra por la que necesito pasar A MI PROPIO RITMO Y SIN TRATAR DE COMPLACER A NADIE.

Y sí, si tengo que volver a convertirme en un esqueleto andante, que así sea. Me da un poco igual que me juzguen, porque sólo el que pasa por cosas así en su cabeza sabe lo que se siente y la lucha diaria que es mantener los ojos abiertos luego de tomar consciencia de que despertaste a un día más.

Me encantaría publicar algo como lo siguiente en mis redes sociales: "¿Saben qué? Sí, estoy en una mala etapa oooootra vez; sí, tengo pensamientos autodestructivos; sí, no me valoro ni veo todas las cosas positivas en mi vida; sí, me la he pasado perdiendo el tiempo valiosísimo que todos los humanos tenemos por estar tan ensimismada; sí, no tengo ganas de salir a ver a nadie y no quiero que nadie me vea para criticarme y me canso fácilmente de estar con gente, necesito mi espacio; sí,sí, estoy teniendo mucho miedo y rechazo hacia la comida y hacia engordar; sí, me siento mejor no comiendo como antes; sí, incluso he terminado vomitando algunas veces por la presión de hacer cosas para las que no me sentía preparada, o por rabia, o por tristeza, o por miedo. ¿Y saben qué? ES MÁS NORMAL DE LO QUE CREEN. A medio mundo le pasa. Todos sienten que su vida no tiene sentido en algún momento, y sí, quizás me cueste salir de ese estado, pero voy a estar mejor. Jamás voy a ser funcional y mi vida no va a ser como yo quisiera, probablemente me quede sola y sin amigos, pero ni modo, así me tocó. Dejen de sentir lástima por mí porque en realidad la peleo y trato de mantenerme a flote. Y esto va a seguir pasándome por el resto de mi vida, así que el que quiera puede treparse al barco pero bajo mis condiciones".

Pobres de los que están en el barco.

Pobre de mí, que me la paso teniendo lástima por mí misma.

Básicamente eso fue lo que me dijeron ayer: que me victimizo mucho, que todos han pasado por situaciones difíciles, que trato de llamar la atención tratando de no llamar la atención, que no brillo, que algo me pasa, que no soy divertida, que me tomo las cosas que dicen demasiado a pecho, que no debería malinterpretar sus bromas, que tengo potencial pero no lo veo. No, no lo veo. Y tampoco lo voy a poder ver porque esa es mi discapacidad. Friéguense. Jamás me va a sobrar la autoconfianza, nunca voy a poder estar 100% cómoda con mi cuerpo porque ASÍ SOY, siempre voy a buscar el punto negro del asunto porque hasta en terapia he sido así, sólo que aprendí a no concentrarme tanto en eso y pensar diferente.

Pero ahora mi mente está en el camino antiguo por el que transitaba desde los 12 o incluso antes, porque también la situación en la que estoy envuelta se parece mucho a la que tenía cuando tenía esas edades.

Sí, busqué estar mal a propósito porque lo extrañaba. Sí,quería hacerme daño porque soy una adicta; sí, pues, no aguanto mucho tiempo siendo normal. Sí, no me hallo sin drama, sin TCA o sin depresión o sin algún problema emocional existencial. Sí, pues, soy una fregada, vengo fallada de fábrica, ¿qué puedo hacer?

Déjenme ser.
Dejen de tratar de controlarme.

**********

¿Saben qué es lo peor de todo?

Que mi cerebro solito también aplica todo lo aprendido anteriormente en mis internamientos y en terapia. Solita me voy diagnosticando, todo el tiempo. "Víctima de tí misma", "autocharla negativa", "sesgos y distorsiones cognitivas", "creencias centrales negativas fortalecidas", "dificultad para interactuar socialmente", "personalidad inestable", "autoaislamiento"... pero sobre todo, FLOJERA. No me da la gana de estar bien. Tengo todas las herramientas y me da flojera usarlas.

Estoy cansada de tener que esforzarme para pensar bien. Estoy cansada de tener que esforzarme para existir. Eso es lo más triste de todo. Que no me da la gana de estar bien.

No hay comentarios.: